Sinceramente, creo que nada, nada ha de cambiar, si acaso afinar más. Si tuviera que resumir mi punto de vista, la actitud, de un emprendedor, ante los nuevos retos en los negocios, diría que, en estos tiempos que corren, habría que ser todavía más emprendedor.
¿Más ortodoxo? sí, es una forma de calificar la actitud, pero puestos a bromear sacándole punta al tema, yo diría que el emprendedor debe ser un integrista sistémico, por sistema. Las cualidades de los emprendedores tienen que brotar más que nunca. Lo explico en unos pocos tips, si me sigues claro.
Persistente. Hasta ahora todo había sido coser y cantar. Antes de la crisis económica, ahora los proyectos necesitan de mucho más tiempo para lanzarse, para despegar y tomar vuelo. Eso es válido para muchos aspectos de los negocios, para el marketing digital, por ejemplo, para un buen posicionamiento web de un portal. Todo va más lento y la paciencia, la persistencia, armada con la constancia se ha convertido en una virtud con más poder.
Largoplacista. En esa línea, un emprendedor siempre vitaminado con el optimismo con el que rema en la crisis, con sus remos cortos, ha de pensar en cambio a medio, y, sobre todo, a largo plazo. Con una idea muy clara de a dónde quiere llegar, pero dispuesto a dar un golpe de timón para aprovechar las oportunidades que se le presenten.
Austero. La austeridad que para los responsables de pymes era antes una ley de Moisés ahora es una ley del Universo Si hay que invertir en el marketing online, sin ir más lejos, hay que hacerlo con la mirada puesta en el gasto, en los beneficios, en los plazos de esos retornos económicos y en cómo se van a asumir.
Tendente. Por tendente quiero decir tener claro que hay que ir detrás de las tendencias. Es una paradoja y un lugar común de comentarios de cafetería que la situación económica representa un conjunto de oportunidades que hay que saber buscar. Y es así, de lo que se trata es de ver esas oportunidades y volverlas negocios rentables.
Todo gira ahora en hacerlo de la manera más económica, el objetivo, por tanto, es hacer recortes inteligentes y funcionar bajo costo. Recogidas selectivas, ecoemprendiduría, tratamientos alternativos, son palabras que suenan mucho y que tienen infinidad de caras rentables. Ahí hay un filón, o varios.
Una coletilla final ¿Sabías que el carácter chino con el que se escribe la palabra emprendedor se utiliza también para el de peligro, pero igualmente para el del término oportunidad?. La mentalidad china no ve diferencias, los mejores emprendedores seguro que también lo ven así. Sigue la estela de ese sentido.
Contra los avatares de la crisis económica, el emprendedor en su avatar, emprendiduría a regla.