Que Internet trajo consigo un cambio fundamental en el sector del comercio no es ninguna novedad, como tampoco lo son los esfuerzos de adaptación llevados a cabo en los últimos años por los profesionales de este sector. La creación y consolidación del comercio electrónico es un hecho, pero esta condición está sometida a cambios continuos.
Una muestra de ello es el estudio Pulse of the Online Shopper Europe Study, recientemente publicado por la consultora internacional ComScore. Con su lectura accedemos a una gran fuente de información, que nos permite extraer algunas conclusiones en torno a la experiencia de compra de los usuarios que utilizan la Red.
Probablemente la más significativa es que, lejos del miedo que suponía en sus comienzos realizar una compra a través de Internet, los consumidores europeos se muestran cada vez más convencidos de la viabilidad de esta opción comercial, que viene acompañada de múltiples matices.
El cambio ha sido tal que hoy en día los compradores online esperan que las e-commerce mejoren su política de transparencia, facilitando fundamentalmente los costes totales al inicio del proceso de compra. Esta condición constata una vez más que la falta de información proporcionada durante la compra es el motivo principal por el que los consumidores abandonan su carrito.
Asimismo, del estudio se desprende que los clientes demandan cada vez mayor flexibilidad, tanto para elegir la fecha de entrega del producto adquirido como para tener la posibilidad de recoger la compra en una tienda física. En ambos casos, el porcentaje de clientes que opta por las dos opciones se sitúa en el 55 y 53% respectivamente.
Más datos destacables en torno a la experiencia de compra online la valoración, extremadamente positiva, que los consumidores hacen sobre la visibilidad de los productos que buscan. De hecho, un 96% de los consultados señala que para ellos es esencial acceder a lo que busca de manera sencilla. Al 65%y el 62%, asimismo, no les importaría acceder al servicio de alertas de la tienda online, así como a las newsletters enviadas por ésta.
A esta condición, exigente, de los consumidores, se suma otra característica no menos llamativa: la forma que utilizan para asomarse al ecommerce. Este acceso se lleva a cabo cada vez más a través de dispositivos móviles, smartphones y tablets incluidas, que son utilizadas en un 50 y un 60% respectivamente.
Datos que nos ofrecen una visión panorámica de la situación del comercio electrónico, cifras que nos mueven a la reflexión, sobre todo teniendo en cuenta las necesidades que expresan los usuarios de Internet y su comportamiento de compra.
