¿Te has planteado realizar una auditoría SEO de tu web? ¿Sabes en qué consiste? En este artículo te contamos por qué deberías hacerla y en qué consiste, por si te decides a realizarla tú mismo, o si lo contratas a un tercero.
Una auditoría SEO es clave para empezar con buen pie cualquier proyecto de posicionamiento SEO. Nos indicará el punto de partida. Y lo más importante, nos ayudará a priorizar tareas a la hora de solucionar todos los errores detectados y realizar todas las mejoras planteadas.
Ya te contamos los pasos para realizar una auditoría. Pero en este artículo nos vamos a centrar más en qué consiste, las herramientas que puedes utilizar, y los beneficios que puedes obtener de ella.
Auditoría SEO, ¿en qué consiste?
En cualquier Proyecto web llega un momento en el que hay que realizar una auditoría. Los motivos pueden ser varios:
- No se están consiguiendo las visitas esperadas.
- El crecimiento orgánico no es el esperado.
- La calidad de las visitas no es buena (tráfico no cualificado), y por tanto no se realizan las conversiones esperadas.
- Se ha sufrido una bajada considerable en las posiciones de los resultados de búsqueda.
- O simplemente porque se quiere mejorar el rendimiento web.
Ahora bien, ¿qué fases incluye una auditoría web?
Para conocer el estado de salud de una web hay que analizar todos los aspectos de la misma, tanto los internos (on page), como los externos (off page). Y podríamos dividirlos en 3 grandes grupos:
Indexabilidad
Es la parte más técnica, donde se analizan aspectos como la velocidad de carga, el estado de indexación de las URL, archivos como el robots.txt o el sitemap, etc.
En definitiva, se trata de detectar lo fácil o difícil que tienen los robots de Google u otros buscadores el acceso a nuestra web, y la correcta indexación de los contenidos.
¿Qué herramientas se pueden usar en esta fase?
Sin duda, Screaming Frog. Es la herramienta de cabecera para cualquier Auditoría SEO. Al principio su uso no es muy intuitivo, pero existen multitud de tutoriales para aprender a manejarla. Cuenta con una versión gratuita, pero con muchas limitaciones. Ahora bien, al principio nos vendrá muy bien descargarla para empezar a familiarizarnos con uso y conocer sus funcionalidades.
En resumen, lo que emula esta herramienta es al robot de Google rastreando una web, y nos devuelve el estado y la información de todas las URL. Lo que nos permite detectar un sinfín de posibles errores:
- Códigos de estado http - ¿existen páginas que devuelven un error http? ¿se han hecho bien las redirecciones 301?...
- Título de la página, H1 y metadescripción - ¿tienen la longitud adecuada para que no se corten en los resultados de búsqueda?
- Tamaño de la página, tiempo de respuesta (velocidad de carga), ratio texto código - ¿cargan rápido las páginas de la web, tienen mucho código y poco texto?
- Las directivas como la URL canonical, el metarobots - ¿se está permitiendo el rastreo de esta página, y de sus enlaces?
Y así podríamos seguir con más funciones. La verdad es que es una herramienta muy completa y que aporta mucha información. Existen otras, como Website Auditor o SiteBulb, pero ésta se ha impuesto a las demás quizá por su gran relación calidad precio.
Además de esta herramienta, también es fundamental que tengamos acceso a la herramienta de Google Search Console. En ella podremos averiguar algo muy importante en todo auditoría.
¿Cuántas páginas se están indexando? ¿Y cuántas tenemos publicadas?
Enfrentando estos dos datos, podremos ver fácilmente si se está indexando contenido que no debería, o si por el contrario hay páginas que no están en el índice de Google. Es decir, tanto por exceso como por defecto.
Visibilidad y Relevancia
Una vez hecha la parte más técnica de la auditoría, vamos con el apartado de la visibilidad y la relevancia.
Visibilidad de una web son las posiciones que ocupan sus páginas en los buscadores para las distintas búsquedas o palabras clave. Relevancia hace referencia a la optimización de esa página web para la búsqueda o palabra clave en concreto.
Por tanto, se trata de conocer las palabras clave por las que quiere posicionar la página web objeto de la auditoría, por cuáles lo está consiguiendo, y en qué posiciones.
¿Y cómo analizamos la visibilidad orgánica y la relevancia de una web?
Aquí existen multitud de herramientas, y no es que haya ninguna mejor que otra. Las dos más conocidas son Sistrix y Semrush.
Ambas herramientas nos van a dar una visión de cómo ha ido evolucionando la visibilidad orgánica en los buscadores de la página web. De esta manera podemos detectar a simple vista si la web ha sufrido una caída o estancamiento en su visibilidad, y averiguar el por qué.
En esta fase el análisis no es tan sencillo como parece, y las herramientas lo único que harán serán aportarnos datos. Pero hemos de ser nosotros, con un análisis muy pormenorizado, sentido común y, sobre todo, con la experiencia, los que detectemos el problema real y sus posibles soluciones.
Muchas veces simplemente se desconocen acciones que se han llevado en la página web y que han sido el desencadenante del problema. Por eso, cuanta más información de primera mano se tenga, mejor.
Desde la estructura al detalle
Se debería empezar desde lo más alto: ¿es adecuada la arquitectura de la web, están bien estructurados los contenidos desde un punto de vista SEO y de Experiencia de Usuario?
Para acabar entrando al detalle de cada página web, analizando la optimización frente a su palabra clave:
- ¿Se incluye la palabra clave en el título, H1 y metadesripción?
- ¿Cuántas veces se repite la misma dentro del texto, existe sobreoptimización?
- ¿Se está utilizando semántica relacionada?
- ¿Se incluyen enlaces internos y externos?
- ¿La página invita a la lectura?
Y así un montón de preguntas que, sobre todo con sentido común, nos acaban dando la pista de dónde está el problema. Herramientas como Website Auditor o Ryte nos ayudarán con informes como el de Tf-idf (Term frequency, inverse document frecuency), donde conoceremos la densidad de la palabra clave principal y las secundarias de los primeros resultados de búsqueda.
En esta fase también se debería incluir una auditoría de enlaces internos. ¿Se están enlazando las páginas entre sí correctamente? ¿A qué distancia de la Home (profundidad de enlace) están las páginas más relevantes de la web? Etc.
Popularidad o perfil de enlaces entrantes
Y por último, quedará realizar el análisis off page. Es decir, los enlaces externos. Las herramientas anteriores también nos ayudarán en esta labor. Aunque hay dos herramientas que siempre han destacado por encima del resto para realizar una auditoría de linkbuilding: Ahrefs y Majestic SEO.
Lo que se trata es de conocer la popularidad de la web. ¿nos están enlazando desde otras webs? ¿son de calidad? ¿cuál es el perfil de dichos enlaces?
Es muy importante conocer el perfil de estos enlaces y sus textos ancla para conocer si hemos pecado de sobreoptimización. También para conocer si nos están enlazando desde sitios spam para desautorizar dichos enlaces.
Ventajas de una Auditoría SEO
Aunque los beneficios de una Auditoría SEO son múltiples, lo más importante es que nos permitirá conocer su estado de salud. De esta manera podremos:
- Trazar una estrategia a medio y largo plazo para aumentar la visibilidad en buscadores.
- Solucionar problemas que a lo mejor no sabíamos ni que existían.
- Priorizar los aspectos más urgentes frente a otros que puedan esperar.
- Aumentar el tráfico de calidad. Ya que lo que se trata es de vender, no de conseguir visitas sin mayor objetivo.
Realiza periódicamente una #AuditoríaSEO de tu web para conocer su estado de salud y fijarte unos objetivos realistas priorizando tareas
Espero que este artículo te haya servido para conocer la importancia de una Auditoría SEO, y aquellos aspectos que debería incluir. Si necesitas ayuda siempre puedes contactar con nosotros.
Imagen de cabecera "Auditoría SEO" cortesía de Depositphotos